El Sendero 22 es llamado Inteligencia Fiel, porque en él están depositadas las virtudes espirituales que se acrecientan hasta que afluyen hacia los que habitan bajo su sombra. Su letra regente es el Lamed.
Es el Sendero que conduce de Gueburah a Tiphereth y su regente es el genio 37 Aniel en la Ida y el 44 Ylahiah en el Retorno. En él las virtudes espirituales acumuladas en Tiphereth quedan a disposición de Gueburah, para que las utilice en sus trabajos, ya que en ese Séfira confluyen las emanaciones procedentes de Kether, Hochmah, Binah y Hesed, así como la quintaesencia de los Sefirot inferiores -es decir, las experiencias materiales realizadas por estos y convertidas en virtud. El texto yetzirático dice que se acrecientan, dando a entender así que las virtudes espirituales no son utilizadas como deberían serlo: la producción de Tiphereth no es absorbida por Gueburah.
Pero esas Virtudes, a fuerza de acumularse, un día acaban afluyendo hacia «los que habitan bajo su sombra«, esa sombra tan genuina de la Columna de la Izquierda. En esta afluencia reside la fidelidad que caracteriza ese Sendero: la Luz espera fielmente las Tinieblas; espera a que pueda ser comprendida por ellas e incorporada al trabajo humano.
En los Senderos 18 y 19, los de Binah-Gueburah y Hesed-Gueburah, este realizaba funciones receptivas en el Descenso. En el Sendero 22, Marte, por primera vez realiza funciones masculinas, en vistas a la implantación de la dinámica divina en el mundo material. Marte insemina Tiphereth, o sea, le transfiere sus propiedades internas para que las inscriba en su Voluntad Ejecutiva.
¿De qué propiedades se trata? 1º: de las que Marte ha recibido de su superior Binah a través del Sendero 18: las Leyes que presiden en la construcción del Universo. 2º: las que Marte ha recibido de Júpiter a través del Sendero 19: el mandato de dar cuerpo al Deseo. 3º: Las inherentes a la propia personalidad de Marte, como gestador de la Personalidad Legislativa que es, en su calidad de He de Binah y como gestador de la Personalidad Emotiva, en su calidad de He de Hesed.
Marte es el que forma en su seno dos personalidades que en un primer momento son contradictorias. Son esos hermanos gemelos que se combaten y se devoran; el guardia y el ladrón de los juegos infantiles; el defensor del orden y su transgresor. Por consiguiente, Marte es en sí mismo el gran portador de contradicciones, pero también el conciliador, ya que su dinámica tiende a Integrar las dos personalidades.
Todo ello, Marte lo inocula en Voluntad-Tiphereth, para que esa contradicción interna sea exteriorizada. El Sendero es llamado Inteligencia Fiel porque Marte, en definitiva, transmite fielmente lo que ha recibido de sus superiores, y si es el portador de la contradicción, es porque se le ha conferido ese papel: el de gestar dos personalidades divergentes y que han de conciliarse a lo largo del proceso evolutivo.
La contradicción interna crece en Marte, sube de nivel, hasta que se derrama al exterior, por ese Sendero 22: “Se acrecientan, hasta que afluyen hacía los que habitan en su sombra”, dice el texto yetzirático. Los que habitan a la sombra de la contradicción son las tendencias aún inmaduras, que al recibir el derrame de las virtudes de Marte, cobran fuerza y se convierten en Impulsos Activos.
Marte amamanta pues dos personalidades que han de resultar necesariamente conflictivas, puesto que la de Deseos tiende a una expansión infinita, a una conquista ilimitada, mientras que la Personalidad Jurídica, reglamenta, distribuye espacios limitados, establece las reglas del juego.
Esas dos personalidades se manifiestan alternativamente en los distintos tramos del Sendero 22. Cuando los tramos son regidos por Centros de la Derecha, es la Personalidad Emotiva la que afluye. Cuando los tramos son regidos por Centros de la Izquierda, es la Personalidad Jurídica o Legislativa la que se derrama al exterior.
Cuanto mayor es la fuerza con que se manifiesta la Personalidad Emotiva, mayor será el protagonismo de la otra. Bien lo vemos en la vida social: si se trata de retirar un borracho de la vía pública, un solo agente basta; pero si se trata de hacer frente a una manifestación ilegal del pueblo, es preciso movilizar todo un batallón.
En este Sendero, el Sol recibe la orden de Marte de manifestar estas dos tendencias; de poner su Voluntad en juego para que puedan manifestarse en el mundo físico. Antes de que esto acaezca, esos dos hermanos contradictorios viajarán por nuestro interior, declarándose la guerra en nuestro fuero interno. Y así, mientras uno correrá a la conquista de todos los placeres, el otro se infligirá severos correctivos en forma de auto-castigos, que pueden conducirlo incluso a la muerte.
En este sentido, una Cuadratura Marte-Sol en un Horóscopo indicará que la personalidad jurídica se expresa despiadadamente respecto a la otra, sobre todo si Marte se encuentra en un signo dominado por un Séfira de la Izquierda, y más le valdrá al interesado que suprima deseos y renuncie a placeres, porque el hermano policía que lleva dentro está armado hasta los dientes y no dudará en utilizar su poder represor.
Es un Sendero donde la luz y las Sombras viven su historia de amor, como esa novia que espera fielmente a su amado, prisionero en las redes de la materia, cumpliendo condena. Si las Virtudes Espirituales no se acumularan, si se dispersaran hacia otros caminos, no forzarían su reconocimiento por las sombras y estas seguirían siendo lo que son y la luz también y, como dice Juan en su Evangelio: La Luz sobre las Tinieblas resplandecería, pero las Tinieblas no la comprenderían.
A nivel humano, la dinámica de este Sendero nos invita a poner nuestras Virtudes Espirituales al servicio de nuestro trabajo, de manera que nuestra espiritualidad no vaya por un lado y nuestro esfuerzo físico o intelectual por otro. El trabajo profesional debe ser el canal conductor de la luz de nuestra conciencia y debemos negarnos a realizar aquello en lo que no es posible proyectar esa luz.
