El segundo aspecto que se produce entre dos planetas es el de semi sextil o sea, una separación de 30º.
Se trata de un encuentro armonioso, que ha de aportar su granito de arena para que en su día se produzca un efecto. Por ser un aspecto primerizo, no cabe esperar del semi sextil un efecto favorable inmediato, tanto más en cuanto que moviliza fuerzas zodiacales que no permiten la constitución de una realidad cualquiera.
Como he señalado, el semi sextil une elementos que no se complementan, bien sea el Fuego y la Tierra; la Tierra y el Aire; el Aire y el Agua o el Agua y el Fuego. Pero el que no se complementen no significa que no estén destinados a complementarse. El objetivo de la vida reside, precisamente, en que todo el zodíaco sea para nosotros algo tan familiar y conocido como el camino a nuestra casa.
El semi sextil indicará, pues, que la persona está trabajando para un objetivo lejano, conciliando fuerzas que aún no pueden ser domesticadas, pero que un día lo serán, de modo que gracias a su influencia la vida toma una inclinación hacia lo que debe ser sin que la persona tenga una clara conciencia del hecho.
En la vida mundana, interpretaremos el semi sextil como una predisposición favorable hacia algo para lo cual las fuerzas de la personalidad lucharán.
Para dar un ejemplo, pongamos que para el futuro campeón de natación, el semi sextil representa el período infantil en el que aprendió a nadar, hecho insignificante en sí, pero sin el cual ulteriormente no hubiera podido realizar su destino.
Este aspecto, considerado como menor, puede tener mucha importancia para el feliz final de una empresa. La naturaleza de esta empresa nos la desvelarán los signos y Elementos involucrados en ese aspecto.
En el semi sextil podemos ver las virtudes especificas de Hochmah (el centro dos de El Árbol de la Vida), o sea, le pondrá el Amor que ha de permitir, en su día, que aquella voluntad creadora encuentre, en el marco material en que aparece, todo lo que está en afinidad.
Ya vimos que el Amor de Hochmah se manifiesta en el universo como una fuerza que lo une todo, separando de cada cosa los elementos que, por su naturaleza, imposibilitan esa unión. Ese poder de unión es el que Hochmah pone en el Semi-Sextil.
Ese trabajo se realiza en el secreto de la naturaleza interna y nada aparecerá en el exterior. La divinidad trabaja en la entraña de nuestra tierra humana y por esa razón la astrología tradicional no considera este Aspecto importante, porque nada se mueve en la superficie.
Otra de las claves de Hochmah es que aporta ayuda divina, lo que llamamos suerte, así que el Semi-sextil será portador de suerte.
El Semi-Sextil es un Aspecto activo a nivel de Emanaciones y solo demostrará su eficacia en el momento de la Sesqui-Cuadratura, que es el Aspecto que corresponde, en el Mundo de Formación, al Semi-Sextil, como tendremos ocasión de explicar más adelante.
El semi sextil corresponde a Hochmah (el centro 2 en El Árbol de la Vida).
Claves: Hochmah-suerte. Semi sextil: Suerte. Facilidad para unir lo que se puede unir. Sabiduría. Estar atento a las facilidades que surjan. Circunstancias propicias a la realización de nuestro propósito. Facilidad de comprensión. Ayuda de la providencia.